Lucas 23:54 «Era día de la preparación, y estaba para comenzar el día de reposo.»
Apreciados lectores,
estamos en el tiempo que conocemos como la Semana Santa, perìodo en el cual se rememora la pasiòn. Muerte y resurrecciòn de nuestro señor Jesucristo. Son dìas durante los cuales las reflexiones relativas a los hechos històricos de la vida de Jesùs de Nazareth sostienen un peso diverso a las consideraciones que en la horizontalidad de la vida cuotidiana hacemos, sin dejar de tener presente en momento alguno la buena batalla por la libertad y la liberaciòn de Venezuela. AiresVen nace como grupo de oraciòn por Venezuela y se transforma en una configuraciòn socio-polìtica cristiana, propositiva, noviolenta; cuya acciòn polìtica es también testimoniar la actuaciòn de la tiranìa de horror y de terror que usurpa el estado de la otrora Repùblica de Venezuela. La denunciamos haciendo conocer una de sus caracterìticas màs resaltante: ser una organizaciòn criminal que se adueñò de élla para darse una imagen de ser un sistema democràtico, apoderarse de inmensas riquezas, establecer un narco-estado con visos de legitimidad y legalidad, destruir el paìs y llevar a cabo un proceso de exterminio a ritmos variados -lentos, ràpidos, veloces, inmediatos – de una entera naciòn, la venezolana.
Mas a lo que nos queremos referir hoy es a lo que el versìculo bìblico citado nos lleva a considerar. Del Sàbado Santo al Domingo de Gloria: de “El dìa màs obscuro, el dìa màs bello” para nosotros.
Jesùs es traicionado, acusado, procesado y condenado a muerte en el madero, aùn siendo inocente. Median 2.000 años desde entonces y sin embargo los mecanismos de eliminaciòn de quién disiente con respecto a un sistema ya establecido, anquilosado y de opresiòn por parte de quien ejerce el poder y necesita perpetuar su existencia son similares. Dicen ejercer la Ley, yendo contra la misma ley. La casta polìtico-sacerdotal veìa en Jesùs un enemigo mortal para su estructura y a pesar de que era inocente resolvìan el problema eliminàndolo.
De Jesùs dice el libro de Los Hechos 10:38 que andaba haciendo el bien “… anduvo haciendo bienes …” mas una vez apresado, resultò un intento fallido par Pilatos proponiendo un cambio con un reo en espera de ejecuciòn de la sentencia. Pesò màs Barrabàs, quién fuera liberado a cambio de la vida de Aquél que con su presencia revelaba la maldad, la opresiòn y la dureza de los corazones de la élite dominante de la época.
Sin embargo y a pesar de la ineludible condena, subrayamos que tampoco pudo toda la humanidad de ese momento – representaciòn o reflejo de la actual – evitar de reconocer su inocencia. Es un tema sobre el cual cada lector puede elaborar libremente sus propias reflexiones y consderaciones.
En dicho perìodo; 6 personas testimoniaron su inocencia:
1.- Judas Iscariote: “diciendo: Yo he pecado entregando sangre inocente.”
2.- La esposa de Poncio Pilatos: “Y estando él sentado en el tribunal, su mujer le mandó decir: No tengas nada que ver con ese justo; porque hoy he padecido mucho en sueños por causa de él”.
3.- Herodes el rey: “les dijo: Me habéis presentado a este como un hombre que perturba al pueblo; pero habiéndole interrogado yo delante de vosotros, no he hallado en este hombre delito alguno de aquellos de que le acusáis. Y ni aun Herodes, porque os remití a él; y he aquí, nada digno de muerte ha hecho este hombre.”
4.- Poncio Pilatos el gobernador: “Él les dijo por tercera vez: ¿Pues qué mal ha hecho este? Ningún delito digno de muerte he hallado en él;
5.- Dimas el “buen ladròn”: “Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas este ningún mal hizo.”
6.- El jefe de los soldados que lo crucificaron: “Cuando el centurión vio lo que había acontecido, dio gloria a Dios, diciendo: Verdaderamente este hombre era justo.”
Nosotros, conscientes de ésta nuestra fe, vivimos el cambio de lamento a canto, de tristeza en alegrìa – como bien lo expresa el rey David – al vivir el dìa màs bello en el cual reafirmamos un elemento crucial de nuestra espiritualidad: El Cristo resucitado, Jesùs viviente al Cual seguimos y con el Cual estamos y estaremos.
Con estas breves consideraciones agradecemos al Señor de ser nuestro Salvador. Bien dice un himno: “con una corona de espinas llegaste a ser Rey por siempre”.
La dirigencia de AiresVen dice “Gracias Señor Jesùs” y con San Juan Apostol “Amén; sì, ven Señor Jesùs”. Les deseamos una Santa y Buena Pascua.
“Dios bendiga a Venezuela y a los venezolanos” (Dra. Consuelo Briceño Canelón)
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